es muy simple
No quiero vivir más.
No quiero vivir más.
No se dice en voz alta porque la gente se asusta.
No quiere decir que me vaya a suicidar.
Quiere decir que no quiero vivir más.
No le veo emoción o alegría al mero hecho de vivir.
No tengo ganas.
No tengo ganas de despertarme por las mañanas
y de pensar en un nuevo día
No tengo ganas de hacer café
No tengo ganas de ver gente.
No tengo ganas de cocinar
y tampoco de comer conscientemente
No tengo ganas de hacer ese rompecabezas
de contestar emails
de tener reuniones
No tengo ganas de explicarle a la gente por qué no tengo ganas.
No tengo ganas de que me den ganas de llorar
Tampoco tengo ganas de morir.
No tengo ganas de vivir la vida
Lo que sí tengo ganas
es de tener ganas.
